Cómo instalar fotomurales
La decoración de hoy en día puede admitir muchos estilos, y el uso de las imágenes en un formato amplio ha tomado su lugar para embellecer los espacios creando ambientes únicos.
Los fotomurales autoadhesivos son un gran elemento para decorar una habitación, gracias a su versatilidad, se pueden aplicar en diferentes espacios, como los dormitorios de adultos y niños, el salón, la cocina y hasta en baños.
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¿Qué beneficios aporta la colocación de fotomurales en decoración?
Una de las bondades, es que no se requiere ser un profesional para su instalación a diferencia de otras técnicas de decoración, solamente siguiendo unas sencillas instrucciones serás capaz de colocarlos tú mismo ya que hará que tu habitación luzca sensacional.
Pueden ser de diferentes materiales, existen los que son de vinilo, los que son tipo lienzo, los que son de lona y los que son de papel. Los que nos interesan son de vinilo que son los que normalmente se utilizan para la decoración de interiores.
Cómo empezar a realizar la instalación de fotomurales
Estos fotomurales de vinilo están conformados por dos partes, la primera de ellas es la parte frontal en donde va impresa la imagen, y la segunda es una papel protector que al despegarse deja descubierto el adhesivo para que pueda ser fijado en una superficie.
Como comentábamos, la instalación suele ser muy sencilla y para realizarlo solo se necesitan tijeras o navaja, una espátula de plástico, un paño limpio y cinta de carrocero, además del propio adhesivo que hayas escogido claramente.
El proceso para instalarlos inicia colocando el vinilo en la superficie que se va a cubrir para presentarlo exactamente donde va a ir fijado, para detenerlo en ese lugar puedes utilizar la cinta de carrocero, es importante que utilices solo este tipo de cinta para no arruinar la pintura de las paredes o el vinilo.
Que hacer después de colocarlo
Una vez que esté colocado en el lugar donde se fijará, se va a desprender el papel protector dejando unos diez centímetros descubiertos de adhesivo, el papel protector simplemente puede doblarse hacia abajo para que no estorbe al momento de comenzar a pegar en la pared esa franja de vinilo de diez centímetros que ayudará a sostenerlo mientras se va pegando el resto poco a poco.
Utiliza la espátula envuelta en el paño para tallar suavemente el vinilo para que se adhiera perfectamente y una vez que los primeros diez centímetros estén fijos en la pared puedes retirar los pedazos de cinta de carrocero.
Luego, para que puedas trabajar más fácil, enrolla el resto del vinilo hacia adentro.
Cuando es el momento de colocarlo en la superficie
Desprende un poco más el papel protector mientras mantienes con un poco de tensión el vinilo, con la ayuda de la espátula con el paño ve repasando el vinilo para que vaya adhiriéndose a la pared, eliminando las burbujas y arrugas que puedan irse formando.
De esta forma irás desprendiendo más papel protector del fotomural y desenrollando el vinilo para continuar pegándolo a la pared poco a poco.
Una vez que termines con esa sección, comienza del mismo modo con la que sigue, fíjate que al unir uno con otro quede alrededor de unos dos milímetros sobre el otro para que no se noten las separaciones en caso de contraerse por cambios en la temperatura.
Continúa hasta que hayas completado todas las secciones y ¡listo!